El ya difunto programa Nashville Star -como sabéis el equivalente country de American Idol- no ha sido capaz en sus seis ediciones celebradas de encontrar nuevas estrellas, excepto Miranda Lambert, que ni siquiera resultó ganadora en la primera edición.
En efecto ni Buddy Jewell (2003), ni Brad Cotter (2004), Erika Jo (2005), ni Angela Hacker (2007) o Melissa Lawson (2008), todos ellos ganadores de sus respectivas ediciones, no han cumplido, al menos de momento, con las expectativas de negocio de las casas discográficas o los sueños de forjarse una carrera artística de los ganadores.
Chris Young, vencedor de la edición del año 2006, acaba de editar su segundo disco The Man I want To Be. Tengo que reconocer que su propuesta cercana al sonido tradicional del country (en su versión neo-traditionalist) y su cálido tono barítono de voz me han gustado, son todo un acierto porque creo apuestan por las fortalezas y virtudes del artista de Tennessee y abren una puerta a la esperanza de una prometedora carrera artística.
Otro aspecto que quisiera destacar es el apartado lírico. No se circunscriben a la tradicional temática cowboy, sino que se adentran con valentía, acierto y talento en apartados político-sociales de interés general. También ha resultado acertado el dueto que ha formado con el gran Willie Nelson en el tema "Rose In Paradise", donde sus diferentes estilos vocales se han complementado de manera estupenda.
El doble sentido del primer single, "Voices", el track que da título al disco, el acento jovial del tema "Twenty-One Candles" (coescrito junto a Randy Houser) y, de manera especial, la magnífica versión del tema clásico del soul "Rainy Night In Georgia" (Brook Venton) que nos recuerda al mejor Randy Travis de la década de los ochenta, son todas ellas razones más que suficientes para que merezca la pena hacerse con el disco y darle un voto de confianza.
Más información sobre música country aquí
En efecto ni Buddy Jewell (2003), ni Brad Cotter (2004), Erika Jo (2005), ni Angela Hacker (2007) o Melissa Lawson (2008), todos ellos ganadores de sus respectivas ediciones, no han cumplido, al menos de momento, con las expectativas de negocio de las casas discográficas o los sueños de forjarse una carrera artística de los ganadores.Chris Young, vencedor de la edición del año 2006, acaba de editar su segundo disco The Man I want To Be. Tengo que reconocer que su propuesta cercana al sonido tradicional del country (en su versión neo-traditionalist) y su cálido tono barítono de voz me han gustado, son todo un acierto porque creo apuestan por las fortalezas y virtudes del artista de Tennessee y abren una puerta a la esperanza de una prometedora carrera artística.
Otro aspecto que quisiera destacar es el apartado lírico. No se circunscriben a la tradicional temática cowboy, sino que se adentran con valentía, acierto y talento en apartados político-sociales de interés general. También ha resultado acertado el dueto que ha formado con el gran Willie Nelson en el tema "Rose In Paradise", donde sus diferentes estilos vocales se han complementado de manera estupenda.
El doble sentido del primer single, "Voices", el track que da título al disco, el acento jovial del tema "Twenty-One Candles" (coescrito junto a Randy Houser) y, de manera especial, la magnífica versión del tema clásico del soul "Rainy Night In Georgia" (Brook Venton) que nos recuerda al mejor Randy Travis de la década de los ochenta, son todas ellas razones más que suficientes para que merezca la pena hacerse con el disco y darle un voto de confianza.
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