Como sabéis es uno de los dos hermanos que componían el dúo Louvin Brothers, muy populares especialmente en la década de los cincuenta por sus fabulosas armonías se vieron truncadas trágicamente cuando su hermano Ira falleció en un accidente de tráfico en 1965.
Aprovechando parte del material de aquella época y con títulos tan recordados como "Wreck of the Old 97” “Wreck on the Highway o "Dark as a Dungeon" a los que Charlie quizá no añade nada nuevo pero mantiene impasible su inquietante entrega apasionada. Es un disco lleno de canciones tristes, donde en ocasiones la voz de Charlie tiembla de emoción y en el debemos destacar la magnífica labor de producción de Mark Nevers que ha sabido entender en todo momento lo que necesitaba el artista y cada tema.
No he encontrado ningún tema menor, es más el único defecto que se le podría reprender es que sea demasiado corto de duración. De hecho podemos afirmar que como le sucediera a Johnny Cash, Loretta Lynn o Porter Wagoner, Louvin está haciendo uno de los mejores trabajos de su carrera a una edad en la que otros ya se han retirado desde hace mucho tiempo. Y, al igual que esos artistas, la voz de Louvin ha cambiado enormemente aunque aún más los gustos vocales dentro de la country music en estos últimos 50 años. Sin embargo, es encomiable como Charlie se ha adaptado perfectamente a este material y nos canta baladas a un estilo tradicional que no son sino lecciones de sabiduría que esperamos generaciones más jóvenes sean capaces de aprovechar adecuadamente. Os dejo con esta sentida canción de homenaje que Charlie dedicó a su hermano Ira.
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